Mientras nos alejamos del mundo, eres mío, soy
tuya, tal y como siempre hemos querido…
Somos egoístas; total, eso a quien le tiene
que importar… ninguno sabe lo rico que se siente cuando nuestros cuerpos se
reclaman, cuando en vez de desgastarse se reviven con tanto amor, con tanta pasión,
entrega.
Nadie está consciente que cuando estamos
juntos el mundo nos pertenece, y que ellos solo son el adorno de nuestras fantasías…
que felices somos entre puertas cerradas, abriéndonos a nuestra única verdad,
esto que sentimos.
Eres mío, soy tuya… Tómame y no dudes en
volver a descubrir cada parte de mi intimidad, que te pertenece solo a ti, una
y mil veces más.
1 comentario:
podria decir solo que es muy bueno, pero me encanto que tan pocas palabras puedan dejar dicho tanto..
Publicar un comentario